Empezamos con una nueva serie de una epístola corta pero muy profunda: Gálatas. A lo largo de esta serie veremos la importancia de la gracia y cómo tendemos a desviar nuestra mirada de la misma. " Pablo, apóstol (no de hombres ni por hombre, sino por Jesucristo y por Dios el Padre que lo resucitó de los muertos), y todos los hermanos que están conmigo, a las iglesias de Galacia: Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Jesucristo. " Gálatas 1:1-3 Antes de adentrarnos en la carta vamos a hablar en el blog de hoy un poco acerca del contexto de la misma. No hay duda con quién es el autor de la misma ya que su nombre es literalmente la primera palabra que leemos. De lo que sí hay dudas es en cuanto a la fecha y en cuánto a los destinatarios. En cuánto a la fecha, la principal duda viene por lo descrito en el capítulo 2 sobre las visitas de Pablo a Jerusalén. El problema aquí es más que nada que muchos consideran esa segunda visita que menciona donde Pedro...
Porque lo más importante que podemos hacer es recordar el Evangelio y a Cristo todos los días. Colosenses 3:2