Continuamos con nuestra serie sobre la epístola dirigida hacia Tito. Hoy comenzaremos con el capítulo 2 donde veremos distintos aspectos de una sana doctrina.
"1 Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina. 2 Que los ancianos sean sobrios, serios, prudentes, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia. 3 Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del vino, maestras del bien; 4 que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, 5 a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada. 6 Exhorta asimismo a los jóvenes a que sean prudentes; 7 presentándote tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad, 8 palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence, y no tenga nada malo que decir de vosotros. 9 Exhorta a los siervos a que se sujeten a sus amos, que agraden en todo, que no sean respondones; 10 no defraudando, sino mostrándose fieles en todo, para que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador." Tito 2:1-10
Nuestro pasaje de hoy comienza con un contraste. Pablo, en los versículos anteriores, estuvo hablando sobre cómo las personas no vivían acorde a lo que profesaban creer. Además, había mencionado que los falsos maestros estaban destruyendo a las familias. Es por esto que el apóstol en el pasaje de hoy hablará de la sana doctrina en cada uno de los integrantes de un hogar. Y si, los esclavos en esos momentos eran parte de la misma pero era una cuestión cultural, bajo ningún aspecto se está avalando la esclavitud. Es en este contexto que está nuestro pasaje de hoy, ya no en el contexto pastoral de mitades del capítulo 1. Por lo tanto, los que utilizan cuando dice "ancianas" para hablar del pastorado femenino lo están sacando de su contexto. El "ancianos" y "ancianas" de estos versículos no es una expresión del oficio de pastor, sino que aquí sí está hablando de ancianos de edad.
Muchas veces, cuando se estudia este pasaje, se lo toma como una lista de actitudes morales que debe tener el cristiano. Pero el énfasis no está en las ordenanzas, sino en aquello en lo que se repite una y otra vez ¿Y qué es esto? Aquello que menciona en el versículo 1 como la sana doctrina. En el blog de hoy podríamos desarrollar cada uno de los aspectos morales. Pero dado que no es lo principal del pasaje, y que nos llevaría mucho tiempo, veremos lo esencial que habla Pablo aquí. Entonces no, hoy no va a ser tan expositivo, sino que tomaremos la idea central y profundizaremos en ella.
A menudo hablamos de la sana doctrina como las doctrinas de la gracia, o las 5 solas, etc. Pero aquí vemos algo distinto. Vemos que la sana doctrina no es algo simplemente intelectual. Uno puede tener una teología correcta pero aún así no estar en la sana doctrina ¿Qué es lo que hace a la sana doctrina? Cómo toda esa teología repercute en nuestras vidas. Como dije, este pasaje no es simplemente una lista de cosas morales que el cristiano debe hacer. Sino que su base está en la doctrina. Es por eso que una y otra vez habla de ser "sanos en la fe" (versículo 2), "que la palabra de Dios no sea blasfemada" (versículo 5), "que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador" (versículo 10), o aún mismo la directiva hacia Tito en los versículos 7 y 8.
La doctrina que tenemos quizás pueda ser la correcta, pero ¿qué es lo que la hace sana? Eso es cómo la misma impacta en nuestras vidas. Lo que pasaba en Creta con muchos era que decían creer las cosas correctas, pero luego su vida era totalmente contraria, lo cual hacía que la doctrina pierda prestigio, que las personas no vean a Cristo en ellos por más de que decían que lo seguían. ¿Cuál es el punto en el que una doctrina verdadera se vuelve una sana doctrina, una doctrina adornada, una doctrina de prestigio? Cuando esa doctrina impacta en nuestra forma de vivir. Esta es la diferencia crucial con muchos que predican este pasaje basándose en los mandamientos morales sin ver todo el contexto. Pablo exhorta a vivir una vida piadosa, y llama a Tito a exhortar lo mismo. Pero una vida piadosa no es sólo una vida moral. No es que simplemente debemos vivir como ahí lo vemos. No, esa forma de vivir tiene que estar basada en nuestra doctrina. Es cuando vemos "la doctrina de Dios nuestro Salvador" que eso impactará en nuestras vidas produciendo lo que vemos en ese pasaje.
Concluyendo, una doctrina correcta pero que no impacta en nuestra forma de vivir, y por lo cual vivimos de cualquier forma, es algo totalmente insano, y hace que no importe la doctrina que tengamos. La sana doctrina es la teología bíblica en la cual meditamos y vemos de qué manera nuestro Dios nos salvó a nosotros siendo pecadores y eso repercute en cómo vivimos. Todo eso es la sana doctrina, si tiene una teología bíblica sin impacto, entonces realmente no crees y no has meditado en aquella teología, lo cual hace que quede pisoteada. Te falta crecer y arraigarte en esa teología. Y si tienes la forma de vivir, pero no viene del impacto de "la doctrina de Dios nuestro Salvador", entonces todo lo que tienes es moralismo. Si, el cristiano es llamado a vivir como Pablo nos marca aquí, pero no te concentres en eso solamente, concéntrate en la razón para vivir así, que es Cristo mismo. Es sólo como resultado de esto que podremos decir entonces que sí tenemos una sana doctrina.
Comentarios
Publicar un comentario