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Un Análisis de Juan 3:16

Quizás el versículo más famoso de la Biblia, Juan 3:16 es el versículo que la mayoría de los cristianos conocen de memoria. Sin embargo, también es uno de los versículos más sacados de su contexto, por eso es que hoy quiero que hagamos un análisis profundo de este versículo.

"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna" Juan 3:16
Cuando hablamos de este versículo hay una palabra que inmediatamente se nos viene a la cabeza: "amor". De hecho la versión Reina Valera 1960 le pone, al pasaje del versículo 16 al 21, el título de "De tal manera amó Dios al mundo". Primero que el pasaje es un mismo discurso y una unidad entre el versículo 1 y el 21, con lo cual el tema es el mismo. Entonces para ver de qué habla el versículo 16 realmente, debemos analizar todo el contexto.
El pasaje es una respuesta a la inquietud de un hombre. Nicodemo era un líder del pueblo judío, miembro del Sanedrín, es por esto que vino a Jesús de noche, ya que tenía una inquietud real, y reconocía que Jesús venía de Dios, pero los otros miembros del Sanedrín no podían enterarse ya que pondría en juego su vida. Al reconocer que Jesús venía de Dios, Nicodemo estaba en una guerra interna, ya que los judíos decían que no era el Mesías. Con esto, Nicodemo dudaba si el camino correcto entonces sería el judaísmo. Ante esta duda, Jesús sabiéndola, Cristo le dice que para ver el reino de Dios había que nacer de nuevo, con lo cual lo que el judaísmo decía no era lo que lo iba a llevar al cielo. Ante esta afirmación de Cristo, Nicodemo quedó desconcertado. Con lo cuál Jesús empezará a explicarle primero qué es el segundo nacimiento. Cristo le explica que primero nacemos de la carne (nuestro nacimiento en esta tierra) y luego debemos nacer del Espíritu, ya que para ir al cielo no podemos ir en nuestra carne, con nuestro pecado. Luego de esto Jesús le explica cómo nacer de nuevo, lo cual hará del versículo 13 en adelante. Primero en el versículo 13 afirma de que Él es el Mesías que descendió desde el cielo. Luego en el versículo 14 y 15 Jesús utiliza un tipo de Cristo del Antiguo Testamento para ilustrar lo que pasaría con Él. En Números 21, Israel se vió envuelto en una plaga de serpientes que mordían a las personas y morían como parte de un juicio de Dios contra Israel. Ante la petición de Moisés, Dios le dijo que haga una serpiente de bronce, la clave en una estaca, y todo aquel que fuese envenenado, miraría a la serpiente con fe y se salvaría. De igual forma, el pecado nos mata como el veneno, pero el que mire al que fue colgado en la estaca (Cristo en la cruz) con fe, sería salvo. El versículo 16 entonces amplía este concepto, repite lo mismo que en los dos versículos anteriores pero ya no con una ilustración. Los versículos siguientes hablan de que sin creer en Cristo, nuestro propio pecado al no creerle, nos condena. El hecho de que Dios haya venido para salvarnos y no creerle nos condena por sí solo. ¿Y por qué la gente no cree? Versículo 20: porque al creer en Cristo queda más en evidencia nuestro pecado, sin embargo si creemos, la obra de Dios queda manifiesta (versículo 21).
Ahora que conocemos el contexto, vamos a analizar el versículo. Comienza diciendo "Porque de tal manera amó Dios al mundo". La palabra "Porque" en el original es la palabra gár que se utiliza en el griego para reforzar una expresión, en este caso, reforzar los versículos 14 y 15. Las palabras "de tal manera" indican que de la misma forma que Moisés quiso salvar al pueblo de Israel, Dios quiere salvar al mundo. Sin embargo, la palabra en griego que se utiliza "joutos" implica que también es una manera mucho más grande, ya que nadie nos ama como Dios. La siguiente palabra es "amó" que es agapao, es el mismo amor que Pablo describe en 1° Corintios 13. Esta es la única ocasión que aparece la palabra amor en el pasaje, con lo cual no habla específicamente de eso, aunque sí es una parte importante. Cristo habla más de la condenación y el juicio que del amor en este pasaje. Siendo también que utiliza el tipo de la serpiente de bronce para ilustrar. El bronce en la Biblia simboliza el juicio de Dios. El amor sí es una de las motivaciones de Dios para la salvación, pero Cristo no está hablando de la motivación de Dios como tema central, sino justamente de como necesitamos la obra de Dios y verla con fe para que en nosotros no haya condenación. Dios efectivamente amó este mundo caído y es por eso que para salvarlo envío a su Hijo, ya que debía haber un sacrificio que pagase por nuestros pecados según la ley de Dios y debía haber una obra a la cual mirar con fe. Este sacrificio de Dios entonces es para salvación pero ¿para quién? Para todo aquel que ve el sacrificio y cree. Nunca dice que está salvación es para todo el mundo, a pesar de que amó a todo el mundo, dice que es sólo para las personas que creen. ¿Y quienes son los que pueden creer? Lo vimos en los versículos anteriores, los que nacen por el Espíritu. Y para nacer un bebé no hace ningún esfuerzo sino la madre. De esta misma forma nosotros no hacemos ningún esfuerzo, Dios nos da a luz en el Espíritu, nos hace nacer de nuevo y de esta forma podemos creer en su obra, para que entonces no nos perdamos, sino que tengamos la vida eterna, la salvación de nuestros pecados y la reconciliación con Dios. Si creemos que este versículo habla del amor déjame desarrollar un poco cuando dice "no se pierda". La palabra para perderse en el griego original es apollumi y aparece 100 veces en el Nuevo Testamento pero no siempre traducida de la misma forma. En la Biblia aparece como perder, destrucción y perecer. No sólo es perderse sino ser destrozados, sufrir, desear estar muerto; así es la fuerza de esa palabra. No parece muy amoroso esto. Si habría que ponerle un título al pasaje entero creo que se ve bien en el versículo 3: "el que no naciere de nuevo, no puede ver el Reino de Dios". En consecuencia de esto se ve todo el mensaje del evangelio en el pasaje.
Como vimos, el versículo no habla solamente del amor, habla de todo el evangelio, hablando de la condenación, la regeneración, la fe y la reconciliación. ¿Por qué entonces digo que es uno de los versículos más sacados de contexto? Porque a menudo se utiliza este versículo para predicar un evangelio que es sólo amor, cuando en realidad el pasaje es mucho más que sólo eso, el evangelio es mucho más que el amor de Dios por nosotros. El evangelio habla de Su amor, Su justicia, Su Soberanía, Su santidad, de todos sus atributos. Juan 3:16 habla de la salvación que Dios nos dan, no sólo de cuánto amó Dios a este mundo caído.

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