Muchas Iglesias hablan de que se viene un avivamiento del Espíritu y son intencionadas en buscar esto pero ¿cómo ocurren realmente los avivamientos?¿Cuál es el pensamiento bíblico al respecto?
Para responder a estas preguntas vamos a analizar el mayor avivamiento en la historia de la Iglesia, y no hablo de la reforma protestante del año 1517. Sino que hablo del principio de la iglesia, lo que ocurrió en el primer siglo en Pentecostés. Para saber cuáles fueron las condiciones de ese avivamiento en Hechos 2, debemos analizar los versículos anteriores en Hechos 1. Muchas veces se tiene el concepto de que el avivamiento se busca, sobre todo en las iglesias carismáticas. Buscan sentir distintas cosas, experiencias sobrenaturales como muestra de que está viniendo un avivamiento. Sin embargo, esto no es lo que vemos que hacían los discípulos antes de pentecostés. Hasta el momento, el Espíritu Santo nunca había morado en una persona como lo hace hoy en día, sino que el Espíritu descendía sobre una persona, no dentro. Cuando Cristo ascendió, Él les dio la promesa de que recibirían poder para serle testigos (Hechos 1:8), este poder es la morada del Espíritu, pero hasta ese entonces ellos no tenían idea de lo que era, con lo cual ¿qué hicieron? Fueron al aposento alto a orar en común acuerdo (Hechos 1:13-14). Ahora ¿por qué oraban?¿Para que venga el avivamiento, el Espíritu Santo, y así miles se puedan empezar a convertir? Bueno no podemos estar seguros porque la Biblia no lo dice tal cual, pero si podemos saber de que no oraban por ello. En los versículos 15 a 22 Pedro se levanta a hablar, y no habla en ningún momento de ese Poder, sino que habla de como la Palabra de Dios se cumplió en la traición de Judas y que ahora deberían poner a otro en su lugar. Pedro entonces, ¿recibió esto por revelación de Dios? En ningún lado dice eso, sino que lo más probable es que junto con la oración y la comunión entre todos, también estuviesen reflexionando en la Escritura, con lo cual Pedro se dio cuenta de todo este asunto de Judas.
Luego de la elección de Matías como el que iba a tomas el lugar de Judas, en el día de Pentecostés, es que de repente vino el Espíritu Santo y los llenó. En el versículo 2 del capítulo 2 vemos que ellos, luego de la elección de Matías, seguían haciendo lo mismo: "estaban todos unánimes juntos". Luego de que el Espíritu Santo los llenó a cada uno fue que comenzaron a hablar en otras lenguas humanas y a dar testimonio a cada uno de los que estaban allí en su propio idioma y 3 mil personas se convirtieron en ese momento. El avivamiento se produjo por medio de la llenura del Espíritu Santo de las personas allí presentes. Y fueron llenas del Espíritu primero porque así lo determinó Dios, y segundo, por estar unánimes en oración y meditación de la Palabra.
Efesios 5:18 dice "Y no os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución, sino sed llenos del Espíritu," Hoy en día nosotros también debemos estar llenos del Espíritu, que no es lo mismo que ser morada del Espíritu, lo cual es todo creyente. Para explicar la llenura del Espíritu Santo me gusta como lo pone John MacArthur en su comentario de la Biblia: "El apóstol presenta más bien un mandato para que los creyentes vivan todo el tiempo bajo la influencia del Espíritu al permitir que la Palabra de Dios los controle (Colosenses 3:16) y al llevar una vida pura, confesar todos sus pecados, morir a sí mismos, rendirse a la voluntad de Dios y depender de su poder en todas las cosas. Ser llenos del Espíritu significa vivir en la presencia consciente del Señor Jesucristo y permitir que su mente, por medio de la Palabra, domine todo lo que piensa y hace." Resumiendo, para ser lleno del Espíritu llénese de la Palabra de Dios a tal punto que su vida sea controlada por ella, es en ese momento de control en el que uno es lleno del Espíritu Santo.
En conclusión, ¿pueden haber avivamientos en el siglo XXI? Ciertamente si, el Señor puede hacer lo que quiere. Y de hecho estoy convencido (esto de manera personal) de que en Argentina se está dando uno al estar fundándose tantas iglesias de sana doctrina en los últimos años y a que mucha gente se le están abriendo los ojos a la sana doctrina también. Sin embargo, ¿por qué se dan estos avivamientos (Tanto este, como la Reforma Protestante, como otros)? Como pasó en Hechos, porque la gente cada vez más medita la Palabra y pasa tiempo con Dios. No por buscar lo sobrenatural, no por hablar en lenguas, no por milagros. El verdadero avivamiento se da cuando personas meditan en la Biblia y son utilizados por Dios. Y este no tiene nada que ver, de vuelta, con experiencias sobrenaturales, sino por el obrar de Dios mediante su Palabra.
Luego de la elección de Matías como el que iba a tomas el lugar de Judas, en el día de Pentecostés, es que de repente vino el Espíritu Santo y los llenó. En el versículo 2 del capítulo 2 vemos que ellos, luego de la elección de Matías, seguían haciendo lo mismo: "estaban todos unánimes juntos". Luego de que el Espíritu Santo los llenó a cada uno fue que comenzaron a hablar en otras lenguas humanas y a dar testimonio a cada uno de los que estaban allí en su propio idioma y 3 mil personas se convirtieron en ese momento. El avivamiento se produjo por medio de la llenura del Espíritu Santo de las personas allí presentes. Y fueron llenas del Espíritu primero porque así lo determinó Dios, y segundo, por estar unánimes en oración y meditación de la Palabra.
Efesios 5:18 dice "Y no os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución, sino sed llenos del Espíritu," Hoy en día nosotros también debemos estar llenos del Espíritu, que no es lo mismo que ser morada del Espíritu, lo cual es todo creyente. Para explicar la llenura del Espíritu Santo me gusta como lo pone John MacArthur en su comentario de la Biblia: "El apóstol presenta más bien un mandato para que los creyentes vivan todo el tiempo bajo la influencia del Espíritu al permitir que la Palabra de Dios los controle (Colosenses 3:16) y al llevar una vida pura, confesar todos sus pecados, morir a sí mismos, rendirse a la voluntad de Dios y depender de su poder en todas las cosas. Ser llenos del Espíritu significa vivir en la presencia consciente del Señor Jesucristo y permitir que su mente, por medio de la Palabra, domine todo lo que piensa y hace." Resumiendo, para ser lleno del Espíritu llénese de la Palabra de Dios a tal punto que su vida sea controlada por ella, es en ese momento de control en el que uno es lleno del Espíritu Santo.
En conclusión, ¿pueden haber avivamientos en el siglo XXI? Ciertamente si, el Señor puede hacer lo que quiere. Y de hecho estoy convencido (esto de manera personal) de que en Argentina se está dando uno al estar fundándose tantas iglesias de sana doctrina en los últimos años y a que mucha gente se le están abriendo los ojos a la sana doctrina también. Sin embargo, ¿por qué se dan estos avivamientos (Tanto este, como la Reforma Protestante, como otros)? Como pasó en Hechos, porque la gente cada vez más medita la Palabra y pasa tiempo con Dios. No por buscar lo sobrenatural, no por hablar en lenguas, no por milagros. El verdadero avivamiento se da cuando personas meditan en la Biblia y son utilizados por Dios. Y este no tiene nada que ver, de vuelta, con experiencias sobrenaturales, sino por el obrar de Dios mediante su Palabra.
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