Continuamos con nuestra serie de evangelismo y hoy toca hablar del evangelismo a un grupo muy especial: los judíos. Veremos que hay distintos tipos de judíos en la actualidad y como compartirles el evangelio.
Primero antes que nada debemos tener cuidado a la hora de evangelizar a los grupos que tocan de aquí en adelante. Esto ya que suelen ser grupos que conocen bien su religión y también conocen el cristianismo. Con lo cual, si no estamos bien preparados, indagando un poco más de lo que dice este blog, podemos quedar mal con la persona al no saber qué responder. Para comenzar a ver acerca del tema, debemos aprender un poco de historia. Voy a obviar lo que dice la Biblia acerca de la historia judía porque sino debería hacer un resumen de todo el Antiguo Testamento. Vamos a ver la historia judía luego del año 70. ¿Por qué del año 70? Bueno en este año el templo fue quemado por los romanos y lo único que quedó es el famoso muro de los lamentos. A parte no se ha podido reconstruir primero porque Israel volvió a ser una nación hace relativamente poco tiempo, y luego porque, una vez hecha nación, el lugar donde estaba el templo ya estaba ocupado por el domo de la roca, lugar muy sagrado por los musulmanes donde según ellos Abraham quizo sacrificar a Ismael (no a Isaac) en esa roca donde años más tarde el profeta Mahoma ascendería. Volviendo al tema, a partir de ese año en el cual los judíos se quedaron sin templo, los rabinos comenzaron a focalizarse en el estudio de la Torá (la ley, o sea el pentateuco de nuestra Biblias). A partir de esto los rabinos crearían lo que se denomina como el Talmud, libro el cual es una serie de distintos rangos de interpretación de la Ley. A partir de aquí es donde surgirían distintos movimientos.
Uno de los movimientos más conocido, que si bien en el mundo cada vez hay menos pero aquí en Buenos Aires se ve mucho, es el movimiento de los judíos ortodoxos. Ellos tienen su esperanza directamente en la Ley, la cual intentan cumplir al pie de la letra, aunque todos sabemos que es algo imposible. Y seguramente te preguntas cómo hacen los sacrificios para expiación si no tienen templo pero quieren cumplir toda la ley. Bueno en realidad ya no hacen sacrificios, aunque esperan con ansias poder hacerlo de nuevo, sino que hoy en día su expiación se basa en arrepentirse ante Dios y prometer cumplir la ley. Este es uno de los puntos claves a tener en cuenta para evangelizar a este movimiento, ya que en la ley dice que para que el pecado sea perdonado debe haber un sacrificio de sangre, siendo esto una profecía mesiánica (Levítico 17:11). A su vez algo a tener en cuenta con este grupo es que no creen que el pecado de Adán nos afecte a todos, sino que creen que cada uno puede decidir si pecar o hacer lo bueno y seguir la ley, con lo cual no sirve solamente decir que somos pecadores, porque nos van a decir que nosotros si por no seguir la ley. Le debemos demostrar que ellos también lo son porque también la están infringiendo. Este grupo es de los más difíciles para llegar ya que son muy cerrados y son muy estudiosos del Talmud y la Torá incluso en su idioma original.
El siguiente movimiento es el de los judíos conservadores. Estos son judíos un poco más modernos y "liberales" que los ortodoxos pero igualmente buscan cumplir la ley y siguen el Talmud. Se los puede identificar fácilmente ya que, mientras los ortodoxos se visten de traje, los conservadores se visten con ropa más actual pero siempre con el kipá.
Por último queda el movimiento de los judíos reformistas. Estos ven al Antiguo Testamento como una recopilación de historias o hasta de mitos. Estos son como los católicos que no van nunca a misa. Son judíos por una cuestión de cultura y descendencia pero no se interesan por la ley, con lo cual la evangelización para ellos será una mezcla entre las cosas judías y ateas.
Una vez que sabemos esto vamos a pasar al evangelismo propiamente dicho. Debemos empezar con una serie de preguntas para ver a que grupo pertenece de los que vimos, aunque por la ropa a veces los podemos identificar. Primero debemos demostrar que la ley no puede ser cumplida, siempre sin atacar a la ley ya que es lo más sagrado para un judío, sino que debemos mostrarles a través del pentateuco que no han estado cumpliendo lo que Dios mandó. A su vez debemos mostrar como es que se debe pagar el pecado, con sangre. Una vez dicho esto, le preguntaría qué opina de Jesús. Sabiendo lo que piensa es quizás más fácil presentarle el evangelio. Un libro clave para presentar a Jesús es el libro de Mateo, ya que allí vemos primero la genealogía Real de Jesús y vemos su poder. Es difícil igualmente que podamos leer el Nuevo Testamento con ellos, aunque si ellos están de acuerdo, está bueno leer pequeñas partes de los evangelios (digo pequeñas partes ya que lo crucial con ellos es utilizar el Antiguo Testamento, o Tanaj para los judíos, que es lo que ellos creen). Algo para mostrar en el Nuevo Testamento, a demás de la genealogía, son afirmaciones de Jesús que demuestran su Deidad, como por ejemplo cuando perdona los pecados, cosa que sólo Dios puede hacer, la afirmación de Juan 14:6 también, Juan 8:12, y muchas más. Pero como dijimos antes, lo esencial es mostrarles a Jesús en la Tanaj. Hay dos capítulos claves para esto: el Salmo 22 e Isaías 53. Ambos pasajes muestran el sufrimiento del Mesías, siendo muy claro que habla de una persona en específico y no de Israel como dicen ellos, ya que ¿cuándo Israel pagó por los pecados de muchos, o cuando sufrió y no abrió su boca? Estos dos capítulos debemos estudiarlos a fondo antes de ir con un judío para evangelizarle, ya que son claves para esto. Debemos tener en cuenta que los profetas veían las dos venidas de Cristo como una sola, por esto en ciertas partes del Antiguo Testamento al Mesías se lo pone como un Rey poderoso y en otras como un Siervo sufriente. Por último antes de compartirles el evangelio que ya sabemos, está bueno marcar el hecho de las profecías del Mesías y como Cristo las cumplió. Hay más de 300 profecías, elegí 7 que te gusten y que consideres que están buenas y compartile el versículo del Antiguo Testamento y el versículo del cumplimiento en el Nuevo. ¿Por qué 7? Bueno, hay una estadística que se hizo que dice que las probabilidades de que 7 de las +300 profecías se cumpliesen en una misma persona a lo largo de la historia humana, son las mismas que tiene una persona de llenar la superficie del estado de Texas con pelotas de golf, hasta llegar a un metro de áltura, esconder una pelota de un color distinto en el medio de eso, y que sin saber, a la primera oportunidad, meta su mano en el montón y saque la del color distinto. Y esto solamente con 7 profecías, de las cuales Cristo cumple no sólo 7, sino todas. Algo clave también a tener en cuenta es nunca decir el nombre de Jehová, sino decir el Señor, ya que para ellos es algo muy sagrado a tal punto que prefieren no decirlo. Una vez presentado esto, ya creo que le podemos compartir el hecho de que Jesús es el Mesías prometido, el cuál vino para cumplir la ley y quitar nuestro pecado mediante su sangre, y luego de haber resucitado, nos pide que nos arrepintamos del pecado que Él ya pagó y creamos en Él. Y esto solamente por gracia, no por méritos nuestros.
Para concluir recuerden que para estos grupos hay que estudiar más en profundidad la Palabra y siempre orar al Señor para que nos dé la sabiduría en las palabras y la fortaleza para no ver esto como un debate a ganar, sino ver lo perdido del pueblo de Israel.
Primero antes que nada debemos tener cuidado a la hora de evangelizar a los grupos que tocan de aquí en adelante. Esto ya que suelen ser grupos que conocen bien su religión y también conocen el cristianismo. Con lo cual, si no estamos bien preparados, indagando un poco más de lo que dice este blog, podemos quedar mal con la persona al no saber qué responder. Para comenzar a ver acerca del tema, debemos aprender un poco de historia. Voy a obviar lo que dice la Biblia acerca de la historia judía porque sino debería hacer un resumen de todo el Antiguo Testamento. Vamos a ver la historia judía luego del año 70. ¿Por qué del año 70? Bueno en este año el templo fue quemado por los romanos y lo único que quedó es el famoso muro de los lamentos. A parte no se ha podido reconstruir primero porque Israel volvió a ser una nación hace relativamente poco tiempo, y luego porque, una vez hecha nación, el lugar donde estaba el templo ya estaba ocupado por el domo de la roca, lugar muy sagrado por los musulmanes donde según ellos Abraham quizo sacrificar a Ismael (no a Isaac) en esa roca donde años más tarde el profeta Mahoma ascendería. Volviendo al tema, a partir de ese año en el cual los judíos se quedaron sin templo, los rabinos comenzaron a focalizarse en el estudio de la Torá (la ley, o sea el pentateuco de nuestra Biblias). A partir de esto los rabinos crearían lo que se denomina como el Talmud, libro el cual es una serie de distintos rangos de interpretación de la Ley. A partir de aquí es donde surgirían distintos movimientos.
Uno de los movimientos más conocido, que si bien en el mundo cada vez hay menos pero aquí en Buenos Aires se ve mucho, es el movimiento de los judíos ortodoxos. Ellos tienen su esperanza directamente en la Ley, la cual intentan cumplir al pie de la letra, aunque todos sabemos que es algo imposible. Y seguramente te preguntas cómo hacen los sacrificios para expiación si no tienen templo pero quieren cumplir toda la ley. Bueno en realidad ya no hacen sacrificios, aunque esperan con ansias poder hacerlo de nuevo, sino que hoy en día su expiación se basa en arrepentirse ante Dios y prometer cumplir la ley. Este es uno de los puntos claves a tener en cuenta para evangelizar a este movimiento, ya que en la ley dice que para que el pecado sea perdonado debe haber un sacrificio de sangre, siendo esto una profecía mesiánica (Levítico 17:11). A su vez algo a tener en cuenta con este grupo es que no creen que el pecado de Adán nos afecte a todos, sino que creen que cada uno puede decidir si pecar o hacer lo bueno y seguir la ley, con lo cual no sirve solamente decir que somos pecadores, porque nos van a decir que nosotros si por no seguir la ley. Le debemos demostrar que ellos también lo son porque también la están infringiendo. Este grupo es de los más difíciles para llegar ya que son muy cerrados y son muy estudiosos del Talmud y la Torá incluso en su idioma original.
El siguiente movimiento es el de los judíos conservadores. Estos son judíos un poco más modernos y "liberales" que los ortodoxos pero igualmente buscan cumplir la ley y siguen el Talmud. Se los puede identificar fácilmente ya que, mientras los ortodoxos se visten de traje, los conservadores se visten con ropa más actual pero siempre con el kipá.
Por último queda el movimiento de los judíos reformistas. Estos ven al Antiguo Testamento como una recopilación de historias o hasta de mitos. Estos son como los católicos que no van nunca a misa. Son judíos por una cuestión de cultura y descendencia pero no se interesan por la ley, con lo cual la evangelización para ellos será una mezcla entre las cosas judías y ateas.
Una vez que sabemos esto vamos a pasar al evangelismo propiamente dicho. Debemos empezar con una serie de preguntas para ver a que grupo pertenece de los que vimos, aunque por la ropa a veces los podemos identificar. Primero debemos demostrar que la ley no puede ser cumplida, siempre sin atacar a la ley ya que es lo más sagrado para un judío, sino que debemos mostrarles a través del pentateuco que no han estado cumpliendo lo que Dios mandó. A su vez debemos mostrar como es que se debe pagar el pecado, con sangre. Una vez dicho esto, le preguntaría qué opina de Jesús. Sabiendo lo que piensa es quizás más fácil presentarle el evangelio. Un libro clave para presentar a Jesús es el libro de Mateo, ya que allí vemos primero la genealogía Real de Jesús y vemos su poder. Es difícil igualmente que podamos leer el Nuevo Testamento con ellos, aunque si ellos están de acuerdo, está bueno leer pequeñas partes de los evangelios (digo pequeñas partes ya que lo crucial con ellos es utilizar el Antiguo Testamento, o Tanaj para los judíos, que es lo que ellos creen). Algo para mostrar en el Nuevo Testamento, a demás de la genealogía, son afirmaciones de Jesús que demuestran su Deidad, como por ejemplo cuando perdona los pecados, cosa que sólo Dios puede hacer, la afirmación de Juan 14:6 también, Juan 8:12, y muchas más. Pero como dijimos antes, lo esencial es mostrarles a Jesús en la Tanaj. Hay dos capítulos claves para esto: el Salmo 22 e Isaías 53. Ambos pasajes muestran el sufrimiento del Mesías, siendo muy claro que habla de una persona en específico y no de Israel como dicen ellos, ya que ¿cuándo Israel pagó por los pecados de muchos, o cuando sufrió y no abrió su boca? Estos dos capítulos debemos estudiarlos a fondo antes de ir con un judío para evangelizarle, ya que son claves para esto. Debemos tener en cuenta que los profetas veían las dos venidas de Cristo como una sola, por esto en ciertas partes del Antiguo Testamento al Mesías se lo pone como un Rey poderoso y en otras como un Siervo sufriente. Por último antes de compartirles el evangelio que ya sabemos, está bueno marcar el hecho de las profecías del Mesías y como Cristo las cumplió. Hay más de 300 profecías, elegí 7 que te gusten y que consideres que están buenas y compartile el versículo del Antiguo Testamento y el versículo del cumplimiento en el Nuevo. ¿Por qué 7? Bueno, hay una estadística que se hizo que dice que las probabilidades de que 7 de las +300 profecías se cumpliesen en una misma persona a lo largo de la historia humana, son las mismas que tiene una persona de llenar la superficie del estado de Texas con pelotas de golf, hasta llegar a un metro de áltura, esconder una pelota de un color distinto en el medio de eso, y que sin saber, a la primera oportunidad, meta su mano en el montón y saque la del color distinto. Y esto solamente con 7 profecías, de las cuales Cristo cumple no sólo 7, sino todas. Algo clave también a tener en cuenta es nunca decir el nombre de Jehová, sino decir el Señor, ya que para ellos es algo muy sagrado a tal punto que prefieren no decirlo. Una vez presentado esto, ya creo que le podemos compartir el hecho de que Jesús es el Mesías prometido, el cuál vino para cumplir la ley y quitar nuestro pecado mediante su sangre, y luego de haber resucitado, nos pide que nos arrepintamos del pecado que Él ya pagó y creamos en Él. Y esto solamente por gracia, no por méritos nuestros.
Para concluir recuerden que para estos grupos hay que estudiar más en profundidad la Palabra y siempre orar al Señor para que nos dé la sabiduría en las palabras y la fortaleza para no ver esto como un debate a ganar, sino ver lo perdido del pueblo de Israel.
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